Luchar

19 abril

No te miro desde que te fuiste. No quiero mirarte desde que acaricias otros cuerpos intentando recordar la única sensación que tenías cuando  algún día acariciaste el mío. 

Desde que te siento ausente vivo en un continuo huracán de pensamientos a lo largo de mis horas.

Fuiste inevitable, o evitable, pero imposible querer evitarte. Vi arte representado a duras penas en pieles oscuras y rasgadas. Vi artistas sin lienzo ni pincel que imaginaban todo bajo un puente en un papel. Vi vías de escape hacia una felicidad que ellos imaginaban. Vi antebrazos y piernas marcados ya de por vida... Esas vías de escape demasiado transcurridas. 

Como estar en medio de una carretera un día lluvioso en el que nada te ha salido bien.

Viene un coche a toda velocidad y entonces te planteas seriamente quedarte ahí en medio quieto, inmóvil. Batiendo un nuevo récord  de doscientas quince vueltas de cabeza por segundo... Pero nunca lo haces. Aunque no lo creas, nunca has querido hacerlo. Por muchas cosas malas que sucedan te seguirá siempre una consciente voz dentro de ti animándote a luchar.
La voz que me anima a luchar sigue siendo la tuya, porque siempre creíste en mi cuando el resto del mundo fallaba.

You Might Also Like

0 comentarios